9/27/2006

Metamorfosis

De persona normal, paso a ser un animal. Grito, salto, empujo, me golpeo, recibo golpes, bailo, grito más, me caigo, me levanto, vuelvo a empujar y, alguna que otra vez, se me pianta un lagrimón. Termino dolorido, afónico, sediento, con los oídos zumbando. Es casi masoquista, pero no lo cambio por nada. Es difícil de describir, pero la transformación que "sufro" en ciertos recitales es algo parecido a eso.

Y mañana me espera más.