Dos de mujeres

1. Uno se queda esperando un llamado que nunca llega. ¿Qué hacer? Llamo no llamo llamo pero si llamo quedo como un desesperado pero quedamos en que me llama ella pero si no me llama que pasa pero habíamos pegado onda si hablamos lo más bien y encima me dijo que me llamaba y si perdió mi número si seguro es eso perdió mi número y no me puede llamar. Y al final no llamás. Y todo queda en la nada. ¿Ven? Para eso sirve el msn. Es la forma perfecta del contacto indirecto, sin obligaciones, sin números que perder y con la enorme ventaje de que por msn...somos todos machos.

2. La cosa es así. El histeriqueo femenino es una constante. Es algo así como que si querés comer uvas, bancate las semillitas*. Uno le puede poner todo el huevo del mundo, pero siempre se las va a tener que rebuscar: saludar primero, invitar a salir primero, nunca esperar recibir algún tipo de señal de que el cariño es recíproco. Entonces ahí empiezan las dudas. ¿Realmente le interesa algo de lo que le estoy diciendo? ¿Me contesta por lástima? ¿No me bloquea porque piensa que me voy a tirar a las vías? Claro, siempre hablando desde el nivel de dramatismo al que lo nos llevan estas situaciones. Pero lo que molesta es el histeriqueo al extremo. El "tengo que hacerme la dura, por que soy mujer". Al fin y al cabo, a uno le quedan 4 opciones: o te bancas el juego, o te haces cura, o te haces gay, o no haces nada**. Y para no hacer nada, mejor hacete cura. Así por lo menos tenés una excusa. En fin. Habría que inventar o uvas sin semillas, o mujeres poco histéricas. Mujeres transgénicas. Tan mal no suena...

*en realidad había otro dicho parecido que dice lo mismo pero me lo olvidé asi que me inventé este!

**gracias solcitooo